MTV presentó ayer su entrega de premios particular. Esta de los EMA tuvieron por primera vez un tema: el circo. Por eso estuvieron organizados en un teatro y con un decorado muy particular. Además aparecieron elementos característicos como acróbatas o aros de fuego. Así la presentadora apareció en un aro flotante, Rita Ora bajó en una jaula metálica y Alicia Keys tuvo sobre ella una bailarina colgada en un aro de fuego. Pero el momento cumbre de la noche fue la gran actuación de Taylor Swift, quien apareció en medio de un truco de magia y mantuvo totalmente la temática de los premios.
Los premios tuvieron una retransmisión nefasta (por lo menos la española), llegando a colocar cortes publicitarios en medio de actuaciones. Horrible. Fue una gala con grandes ausencias como el premiado Justin Bieber o varias de las grandes divas de la música como Lady Gaga, Rihanna, etc. Esta última desaprovechó una oportunidad de oro para promocionar su nuevo tema Diamonds y el lanzamiento inminente de su séptimo álbum Unapologetic.
En cuanto a los ganadores, Taylor Swift y Justin Bieber se programaron vencedores de la noche, con tres estatuas respectivamente. El problema de estos premios es que los premios se reparten a los más votados de cada categoría. Es decir, al final los cantantes que los reciben son los que tienen mayor cantidad de fans, que no tienen por qué ser los mejores de ese campo. Esto no tiene por qué significar que sean injustos, pero sí que hay que tomarlos diferente de unos Grammy, en los que los vencedores se deciden por medio de un comité de expertos.
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